Gafes o Jinxs

Cualquier aficionado al deporte te dirá que en las reuniones que se dan para ver eventos deportivos de cualquier tipo, siempre hay algo de superstición absurda implícita (o explícita). Quién no ha dicho u oído decir aquello de: no vemos el partido en casa de fulanito porque allí siempre perdemos, o hay que ver el partido desde que suena el himno o no ganaremos.

Es parte de la liturgia de las reuniones deportivas, creo que todos sabemos que no es cierto pero esos comentarios contribuyen a crear el ambiente apropiado para disfrutar del partido un poco más. Pues que sepáis que esta práctica, como muchas otras que os he ido descubriendo en estos meses también se da en Estados Unidos.

Sin ir más lejos el pasado domingo fuimos a casa de los Bexley a ver la final de conferencia de la NFL (el equivalente a la semifinal de la Superbowl) entre los Vikings de Minnesota y los Saints de New Orleans. Por cercanía, la mayoría de los aficionados el fútbol americano de Mobile apoyan también a los Saints de modo que el partido era importante. Si le sumamos las consecuencias que el Katrina tuvo para la ciudad y el hecho de que los Saints nunca hayan jugado una Superbowl en su historia, hacen que el ambiente fuera espectacular. Quizá el único atenuante es que muchos aficionados no disfrutan con el deporte profesional ya que opinan que el universitario es más auténtico y eso hace que la NFL no sea tan popular pero aún así concita mucha expectación.

En las últimas semanas se ha dado la circunstancia que cada vez que he visto un partido de fútbol americano, el equipo al que animaba ha perdido, entre esas derrotas están los únicos partidos perdidos por los Saints en toda la temporada. Todo esto convenció a Jennifer para pedirme que animara a los Vikings de manera que mi gafe llevara a los Saints a la final. El partido fue emocionantísimo y la presencia de Brett Favre (legendario quarterback) en los Vikings le añadió un gran toque de épica deportiva, aunque al final y por muy poco mi gafe, perdón quiero decir los Saint, se llevaron el gato al agua. ¿Seguirá la racha en la Superbowl del día 7 de febrero? ya lo veremos pero si acaso ¡Go Colts!